sábado, 5 de junio de 2010

Los rivales de Argentina: Corea del Sur

Que nadie se imagine a los coreanos como rivales sencillos. Invictos en catorce partidos, clasificaron dos fechas antes del final de las Eliminatorias. Cuentan con individualidades con pasado y presente europeo. Y nunca paran de correr...

Artículo publicado en la revista El Gráfico, en marzo de 2010.
Por PABLO ARO GERALDES


Esperando su octava participación en la Copa del Mundo, la séptima consecutiva, la opinión es unánime: Corea del Sur es el equipo más fuerte de Asia. Aunque su última copa continental la ganó hace 50 años, cuando llegan las Eliminatorias mundialistas saca a relucir su poderío y desde México 86 tiene asistencia perfecta.
La clásica imagen de los coreanos rápidos en velocidad, voluntariosos para el esfuerzo y torpes para la marca, ha quedado en el pasado. La ingenuidad táctica es solamente un recuerdo; los coreanos se recibieron de equipo en serio en 2002, cuando al mando del técnico holandés Guus Hiddink lograron su punto de inflexión, torcieron su propia historia y treparon hasta el cuarto puesto en el mundial que co-organizaron con Japón. Sí, entonces las ayudas arbitrales rozaron lo escandaloso, pero aquella participación actuó de plataforma de lanzamiento. El triunfo sobre Italia y el empate con España (con victoria por penales) deberían tener su lugar en la historia de los robos a mano armada. Pero los coreanos siguen festejando sin ofenderse por esos detalles.
Aquel buen equipo dibujado por Hiddink dejó su marca, tanto que hoy, ocho años después, cinco jugadores siguen siendo titulares firmes: el lateral Lee Young-Pyo; Cha Du-Ri, que retrocedió en el campo hasta ser hoy zaguero; el volante Kim Nam-Il; el duro extremo Seol Ki-Hyeon y la gran estrella nacional: Park Ji-Sung, con sus cinco temporadas en el Manchester United, nada menos.
Los Guerreros del Taeguk, como se los conoce, clasificaron dos fechas antes del cierre de la Eliminatoria, fueron los únicos invictos tras 14 partidos y dejaron afuera a dos pesados del continente como Arabia Saudita e Irán.

LOS PUNTALES
El primer defensor central Cha Du-Ri es alemán por dos razones: allí nació cuando su padre, Cha Bum-Kun, jugaba con la camiseta del Eintracht Frankfurt y fue el pionero de los asiáticos en Europa, a fines de los 70; y segundo, porque en Alemania hizo toda su carrera profesional. Su papá es considerado el mejor futbolista asiático de todos los tiempos, y él va por el buen camino. Es fuerte, aguerrido y rápido: marca 11 segundos en los 100 metros. Su pasado como delantero lo convierte en una visita peligrosa en el área rival.
Con 110 presencias en la selección, a Lee Young-Pyo le sobra experiencia. Es el dueño del sector izquierdo, puede actuar como lateral y como central y no es raro verlo gambetear y salir jugando al estilo sudamericano. Su currículum dice que estas cualidades no se quedaron en el cabotaje coreano: jugó dos años en el PSV Eindhoven, tres en el Tottenham Hotspur y uno en el Dortmund, en tres ligas muy competitivas. El holandés Martin Jol, su técnico en el equipo londinense, lo caratuló como “uno de los mejores backs izquierdos de Europa”. Hoy juega en el Al Hilal árabe y no le hace falta buena prensa: su esposa periodista es una de las más bonitas de Corea.
En el otro extremo de la veteranía hay dos mediocampistas de 21 años: el central Ki Sung-Yong, y el derecho Lee Chung-Yong. Ki es la cara más nueva del Celtic de Glasgow, Escocia. Su nombre también resulta difícil de pronunciar en las tierras altas del whisky y los señores con faldas, así que lo rebautizaron “David Ki”. Es un tiempista con apropiada visión del campo y buena técnica. Su compañero inseparable también está en las islas británicas; Lee es titular en el Bolton Wanderers inglés. Con ambos se dio un juego de palabras que derivó en otro apodo: “Sang Yong”, que en inglés significa Double Dragon, como el videojuego. Apresurados como son para poner etiquetas, los medios ingleses hablan de Ki Sung-Yong como el “Gerrard coreano”. Si no es exagerado, al menos es prematuro. Al otro, Lee Chung-Yong, The Times lo incluyó en la lista de “50 futuras estrellas mundiales”. Algo saben los ingleses de fútbol, habrá que creerles.
El trabajo duro del mediocampo le toca a Kim Nam-Il, un “veterano de Vietnam”, selección contra la que debutó en 1998. Como un Rambo que todavía se anima a misiones arriesgadas, a los 33 años firmó con el Tom Tomsk ruso, un equipo sin mayores pretensiones pero que lo mantiene activo de cara a la Copa del Mundo. Antes de 2002 era prácticamente desconocido para los coreanos, pero en el Mundial disputado en casa se convirtió en un héroe. Lo apodaron “la aspiradora”, por su inagotable capacidad de ir al suelo y barrer todo lo que pasaba. Su tarea no lucía, pero fue fundamental y se desató una Kimmanía, apoyada por su carácter excéntrico y extrovertido. Como Lee Young-Pyo, también conquistó el corazón de una de las presentadoras de TV más hermosas de Corea, Kim Bo-Nim.
Del talentoso Park Ji-Sung hablamos aparte, lo mismo que del hombre gol: Park Chu-Young. Queda por destacar al grandote Seol Ki-Hyeon, otro delantero con oficio. Lleva una década de Selección y de recorrer las canchas de Europa antes de retornar este año al Pohang Steelers de su país. Con el Anderlecht belga fue el primer futbolista coreano en marcar un gol en la Champions League. A nivel de clubes, los surcoreanos son fuertes dominadores en su región. De 1996 para acá, ganaron 7 Champions League, como se denomina el torneo, a imitación del europeo. Pohang Steelers es el actual campeón (venció en la final al Al Ittihad árabe, conducido por el argentino Gabriel Calderón) y en diciembre participó en el Mundial de Clubes, donde cayó 2-1 frente a Estudiantes. Otra prueba de la inocencia perdida.
“En un Mundial no hay partidos fáciles, así que no tengo por qué quejarme del grupo que nos tocó. Tendremos rivales muy poderosos y cada partido será complicado, pero hemos superado pruebas muy duras en la Eliminatoria asiática. Ya jugamos contra los argentinos en el Mundial 1986 y perdimos. Sin embargo, con esa experiencia y las lecciones que aprendimos, esperamos hacerlo mucho mejor ahora. En 2002, nadie daba nada por nosotros, pero nos metimos en semifinales. Dicen que no estamos entre los favoritos; que digan lo que quieran...”, declaró el DT Huh Jung-Moo después del sorteo en Sudáfrica.
Después de un desfile de técnicos holandeses, él se carga hoy toda la presión. Pero no le asusta. Corea del Sur había jugado solamente un Mundial, el de 1954, cuando él tomó protagonismo en la ruta a México 86: fue el autor del gol a Japón que puso fin a 32 años de ausencia mundialista. Ahora, si da el golpe ante la Argentina de Maradona, se meterá en el mundo grande del fútbol con la misma fuerza con la que empresas como Samsung, LG, Kia o Hyundai irrumpieron en el mercado de Occidente.

2 comentarios:

Riccardo Troiani dijo...

Hi, I'm Riccardo, I would like to make an exchange of links with my soccer blog...STADIO GOAL. Let me know if you are interested in it...thanks...have a good day with you good work!Keep it up!
LINK: www.stadiogoal.com
ANCHOR TEXT: STADIO GOAL

Anónimo dijo...

Lee Chung Yong es un muy buen jugador, la rompió en el Bolton esta temporada. Y por algo fue puesto entre los 50 jugadores jóvenes con mas futuro