viernes, 29 de diciembre de 2017

José Luis Murature

Abogado, periodista, docente y político, José Luis Murature fue Ministro de Relaciones Exteriores de la Argentina desde 1914 a 1916: al confirmarse la licencia del presidente Roque Sáenz Peña (que se prolongaría hasta su fallecimiento) el vicepresidente Victorino de la Plaza nombró Canciller a Murature, y meses después asumió la presidencia.

Durante su mandato estalló la Primera Guerra Mundial. Frente a las presiones internacionales para que el país se involucrara en el conflicto, De la Plaza y Murature coincidieron en mantener una posición neutral.

En el último año a cargo de la Cancillería, la Argentina celebró el centenario de su independencia. En el marco de los festejos, se disputó en Buenos Aires el primer Campeonato Sudamericano de Football, y durante esas semanas los dirigentes de los cuatro países participantes -Argentina, Brasil, Chile y Uruguay- fundaron la Confederación Sudamericana de Fútbol.

Murature, en su función diplomática, vio cómo los uruguayos campeones se iban con las manos vacías y compró una copa de diseño francés confeccionada por la joyería Escasany, de Buenos Aires, a un precio de 3000 francos suizos y se la donó a la flamante Confederación. 

Este trofeo de 9 kilos de plata, 75 centímetros de alto, y 30 de diámetro se entregó por primera vez en la segunda edición, la de 1917, también ganada por Uruguay. Aunque lleva grabado el nombre "Copa América", en los primeros años al trofeo se lo llamaba “Copa Murature”, en honor al Canciller argentino.

El 12 de octubre de ese 1916 Victorino de la Plaza fue sucedido por Hipólito Yrigoyen. En su juventud, Murature había escrito artículos para el diario La Nación, y después de su paso por el ministerio llegaría a ser editor gerente. Durante muchos años fue profesor del Colegio Militar de la Nación y también ejerció algunas misiones diplomáticas.

Se incorporó a la masonería y se destacó como un opositor tenaz a los gobiernos de Yrigoyen y de Marcelo T. de Alvear. En 1928 se sumó a la Academia Nacional de Derecho y Ciencias Sociales. Falleció en 1929, a los 53 años.

Una calle con su nombre recorre los barrios porteños de Vélez Sarsfield y Villa Luro.

martes, 19 de diciembre de 2017

19 de diciembre de 1971

El 19 de diciembre de 1971, el estadio Monumental de Núñez fue protagonista de la apasionante semifinal del Torneo Nacional entre los dos grandes de Rosario: Central y Newell's. Los Canallas vencieron 1-0 con un legendario gol de palomita de Aldo Pedro Poy.

Tres días después, Rosario Central derrotaba 2-1 a San Lorenzo en el Parque Independencia y conquistaba el primer título de AFA de su historia, pero en el corazón de los hinchas la victoria en aquella semifinal contra el clásico y eterno rival sería el momento más recordado. Inolvidable. La fecha histórica del 19 de diciembre de 1971 inspiró al genial Roberto Fontanarrosa, Canalla de alma, a titular uno de sus cuentos más brillantes.

Es una ficción que gira en torno al partido real. Trata la historia del Viejo Casale, quien nunca en su vida había visto perder a Central en un clásico contra Newell's Old Boys. Ante la importancia del partido, un grupo de amigos del hijo de Casale decide invitarlo a viajar a Buenos Aires con ellos. Los muchachos estaban seguros que Casale era un talismán, pero el viejo se niega a acompañarlos alegando una enfermedad del corazón. Ante esta negativa, la barra de amigos centralistas decide planear un secuestro y llevar engañado a Casale al Monumental.

Lo que sigue es tan desopilante como el comienzo. Pero ningún resumen se acercará a la narración gloriosa del Negro Fontanarrosa. Aquí se puede leer el cuento completo.

La formación del 19/12/1971. Arriba: Mario Killer, Norberto Menutti, Aurelio Pascuttini, Ángel Landucci, Alberto Fanesi y Jorge José González. Abajo: Ramón César Bóveda, Carlos Aimar, Aldo Pedro Poy, Carlos Colman y Roberto Gramajo. DT: Ángel Labruna.
Además de la lectura, se puede disfrutar del cuento narrado por la voz inconfundible de Alejandro Apo: